Mabel at the wheel, del año 1914, no es la primera película en la que sale una moto. Creo que la primera es A Motorbike Adventure, dirigida por Alf Collins diez años después de que se inventase el cine en el año 1895, pero apenas si he encontrado información sobre ella. A cambio tenemos a Charlie Chaplin haciendo de motero malo-malote en 1914. En el cine, ya desde sus comienzos, parece que subirse a una moto es sinónimo de maldad, de convertirse en un ser vil y perverso. Aún así, la imagen de Chaplin gobernando la moto bajo una elegante chistera es un icon0 que me resulta ciertamente atractivo.

Este metraje de 24 minutos, como la mayoría del cine “de moteros” que se hizo toda-la-vida es un tostón bastante insufrible en el que no abundan los gags humorísticos y sí mucha mala baba por parte del que habría de convertirse en el entrañable Charlot. El atractivo de la película reside en los primeros minutos donde podemos ver la que probablemente sea una moto Thor IV del año 1913. La empresa que fabricaba estas motos, la Aurora Automatic Machinery Company, fue pionera en la fabricación de motores eficientes a principios del siglo XX. El motor de la Thor, una moto que comenzó a fabricarse sobre 1989, más o menos, estaba derivado de las De Dion, fabricadas en Francia. Es probable que fuese una copia de este pero con muchas mejoras puesto que no había quien lo superase. Después de aquello vino la sociedad formada por Hedstrom, el propietario de AAMC, y Hendee, dueño de Indian, para proveer de motores a la segunda, llegando a convertirse esta en el mayor fabricante de motocicletas del mundo.

Además eran proveedores de motores y otras piezas para Harley Davidson, Henderson, etc. En el año 1920 anunciaron el cese de la producción., Hedstrom se retiró a su rancho de 500 acres en Illinois y ahí se terminaron 30 años de exitosa industria.

 

La película, como queda antedicho, es un soberano tostón, una pieza de baja calidad y la última en la que Charlie Chaplin no sería su propio director. Es la primera en la hisoria del cine en la que una moto ocupa una parte importante de las secuencias.
Aprovechemos los primeros minutos del metraje y sigamos con otra cosa, por ejemplo salir a dar un paseo en moto.