Viajar en invierno en moto supone un placer tan grande como hacerlo en verano, cuando las temperaturas invitan a hacer kilómetros bajo el sol. Claro que en invierno, el frío, la lluvia y las bajas temeraturas obligan a proveerse de todos los adminículos disponibles para combatir el frío.
En mi caso tengo instalados puños calefactables y unas horribles manoplas que, si bien no ensalzan la estética, al menos proporcionan algo de protección a las manos. Mi problema se centra, siempre, en los pies. Se me congelan.
La Vstrom deja los pies demasiado expuestos, tanto al aire como a las salpicaduras de agua que se convierten en un chorro incensante en caso de lluvia intensa. Para paliar, en lo posible, esta situación tan desagradable me planteé hacer una especie de deflectores que se pudieran acoplar a la vStrom y evitaran la congelación de los dedos de los pies. Como mi concepción del asunto estético es algo particular y me da igual si la moto es guapa o fea mientras me lleve y me traiga, he ideado una chapuza que, no por fea, es menos efectiva.
 
Para hacer este engendro que me sacará, de forma provisional, del apuro de pasar tanto frío en los pies, he usado un par de trozos de goma gruesa procedentes de un “batefuegos”, una de esas herramientas que parecen paletas y que se usan para combatir los incendios forestales. Podría haber usado la “faldilla” de un coche o un camión pero no tenía ninguna a la mano.
La unión de la goma a la moto se realizó con un par de bridas a los “pelacrash” o protectores del motor.
El resultado, ya se ve, no es que sea estéticamente bello, ni mucho menos, pero probado el invento ayer a cero grados puedo afirmar que su efectividad está fuera de toda duda. Cuando lleguen los calores estivales solo tengo que cortar las bridas y la moto volverá a ser la misma. 
Para completar el kit calórico me acabo de agenciar unos “chafferettes”. bajo este simpático nombre se esconde, nada más y nada menos que unas plantillas que se activan al contacto con el exígeno y proporcionan calor durante unas cuantas horas. De venta en Decathlon