Tanto en esta página como en el podcast de Viajo en Moto, hablamos muchas veces de viajar con lo puesto, “a la quinta pregunta”. Cantamos las excelencias de andar por el mundo con la tienda de campaña, durmiendo donde coincida y viajar despreocupado, con los planes justos para pasar el día. Pues ayer, gracias a Fran Brighton, un colega motorista, me encontré con el cuaderno de bitácora de un viajero primerizo en esto de andar en moto. Alejandro,que así se llama el protagonista, nos va contando su día a día de forma directa, real y desenfadada. Me ha gustado mucho su blog porque creo que en él se resume a la perfección el viaje que muchos de vosotros tenéis en mente: salir de casa con una ruta sencilla y vivirla de forma despreocupada, sin objetivos grandiosos y sin más esperanza que pasárselo bien.

Alejandro en moto

Salió de casa con una Shadow de 125, sin experiencia en viajes y con un pasado motero que se reducía a sus tiempos de currante en Telepizza. Su equipación: unos vaqueros y una rebequita “por si refresca”. Se recorrió media España y volvió a Alicante resuelto a que ese no fuera su último viaje. Por el camino, entre porro y chupito, fue durmiendo, sin tienda de campaña, al raso, el cementerios, en ermitas o en el medio del monte. Todo eso y más no lo cuenta, huyendo de artificios y grandilocuencias en su blog, Viaje Vaquero. No te lo pierdas porque este tipo es un viajero de los que engancha. Su blog se lee de un tirón y, cuando terminas, te apetece hacer un viaje con este fichaje alicantino.