campamentoEn casi todos mis viajes en moto hay una tienda de campaña y un saco de dormir. No solo por el ahorro que supone sino porque soy un fanático de la improvisación y para mí es primordial poder detenerme a pasar la noche en cualquier lugar que me apetezca. He acampado en áreas de descanso, en campos de trigo, en prados, en polígonos industriales, en polideportivos… En montones de lugares bastante inverosímiles y nunca he tenido problemas.

Para ello hay una serie de “trucos” y recomendaciones de carácter general que casi siempre tienen que ver con el sentido común.

Empezaré diciendo que la acampada libre está prohibida en casi toda España y en la mayor parte de Europa por lo tanto hay que olvidarse de llegar por la mañana a cualquier sitio y montar la tienda de campaña: es ilegal. Pero de lo que se trata no es de hacer una acampada, es una PERNOCTA y ahí las cosas cambian. No legalmente, porque el concepto es el mismo: montar la tienda de campaña, pero sí funcionalmente porque montaremos al atardecer y desmontaremos a primera hora de la mañana; esto pasa muy desapercibido. Insisto, es ilegal y como tal yo,  ni recomiendo hacerlo, ni dejo de recomendar, solo explicaré cómo lo hago y dónde, sin entrar en más valoraciones. Ya somos mayorcitos para saber lo que nos conviene.

A pesar de ser ilegal los problemas con que te puedes encontrar son mínimos si tienes algunas precauciones.

Vayamos por partes.

Cuando uno hace algo que está en los límites de lo legal, las primeras veces puede presentarse cierta inquietud pero que eso no suponga un problema. Al fin y al cabo qué puede pasar ¿Que nos ordenen desmontar el chiringuito? Bueno, pues vale.

Lo primero que tenemos que tener en cuenta es que la zona en la que vamos a pernoctar no sea un espacio protegido. Hay que pensar que éstos son espacios muy sensibles a la presencia humana y allí no pintamos nada. Además están más vigilados que el resto del territorio y los problemas, si nos pillan allí, van a ser mayores.

Fuera de espacios naturales protegidos tenemos un amplio elenco para escoger sin necesidad de asumir riesgos. Mi primera opción suele ser preguntar a algún vecino si puedo instalarme en sus propiedades. Un prado, el jardín, un monte… Si hay bares lo mejor es preguntar a los parroquianos después de haber establecido contacto a base de emulación. Si los autóctonos son amistosos no tendrás ningún problema y enseguida te dirán dónde puedes instalarte. Si no, directamente el puerta a puerta aunque esto ya es más delicado según en qué sitios. En Noruega, por ejemplo, no solo nos impidieron acampar sino que ni siquiera nos indicaron un lugar adecuado. Y eso que había un camping a 7 km.

Otra buena opción es localizar a un policía municipal y preguntarle por un sitio tranquilo para pasar la noche en tienda de campaña. Ya se que parece un contrasentido pero es lo más recomendable. Si las autoridades son muy quisquillosas con el asunto te lo harán saber y te evitarás problemas y si no lo son, estarás tranquilo toda la noche.

Aquí tienes algunos consejos rápidos que pueden servirte de ayuda:

  • Por lo general huye de las poblaciones grandes y de los descampados de las afueras.
  • Es preferible estar solo en mitad del monte que pasar la noche intranquilo por haber montado la tienda en una zona muy transitada.
  • Busca lugares discretos, que no se vean desde la carretera general y que tengan poco tráfico.
  • Huye de los descampados donde haya restos de actividad humana nocturna: botellas, condones, latas… No es muy agradable recibir la visita de las luces de un coche en plena noche.
  • Hasta en las llanuras cerealísticas más abiertas hay un camino que te lleva a una zona resguardada con un par de árboles, mantén los ojos abiertos para encontrar estos sitios.
  • Nunca montes la tienda en el fondo de hondonadas ni en zonas de arrastre de agua. Una tormenta puede llegar en cualquier momento y llenarte la tienda de agua.
  • Orienta la puerta en sentido contrario a los vientos dominantes y coloca todos los anclajes.
  • Procura encontrar el sitio más llano o terminarás enroscado en un extremo de la tienda.
  • Las áreas de servicio tienen unos sitios estupendos para acampar pero no son muy seguras, sobre todo si hablamos de las del Sur de Francia. Mucho ojo con los merodeadores. Si decides quedarte en una busca un sitio alejado de las miradas y procura no dejar el equipaje “suelto”.
  • Si haces fuego (en muchos países está permitido) además de ser precavido con la hoguera no la hagas muy cerca de la tienda, siempre puede saltar alguna chispa.
  • Despeja bien el suelo y, si hay materiales, mulle con lo que pilles: hojas, cartones, hierba seca…
  • No acampes debajo de árboles resinosos (pinos, eucaliptos, tilos…) En unas pocas horas no pasará nada pero en un par de días puedes quedar con la tienda perdida, sobre todo en verano.
  • Si puedes, no cocines en el interior de la tienda: evitarás olores y quemaduras.
  • Mantén siempre la puerta cerrada para evitar que entres mosquitos y otros bichejos.
  • Procura empaquetar la tienda seca y limpia para que no se estropee.

Y recuerda, no dejes huellas de tu paso, sé respetuoso con la propiedad privada y haz de la discreción tu bandera.