4. Los Martes al Sol
Un día más me dispuse a emprender el particular peregrinaje con dirección al occidente de Asturias. Después de un buen desayuno de carne de ternera salí de Oviedo por la 630 con temperaturas bajas pero no desagradables. La bajada hacia Trubia fue tal y como me la imaginaba, a tumba abierta, claro está dentro de los contenidos límites que marcaba el Vespino. Se estaba portando el chisme. Era como si, después de haber roto el escape rodase mucho mejor. El punto negativo era el ruido que cada vez era más alto y comenzaba a molestar. El ascenso al Puerto de La Espina resulto ser también tan tedioso como cabía esperara aunque, con las agradables temperaturas del día todo resultaba más ameno. Los tonos ocres de los robles y castaños formaban un dosel sobre mi cabeza y por fin estaba disfrutando de [...]